El 16 de mayo de 2012 la Organización Mundial del Comercio (OMC) dio a conocer su decisión a favor de México en la disputa sobre los efectos restrictivos al comercio que ocasiona la etiqueta “dolphin-safe”, al confirmar que los requisitos de etiquetado son discriminatorios, afectan la importación y comercialización de atún mexicano en Estados Unidos e incentivan prácticas pesqueras que no son sustentables.

La decisión de la OMC confirma que los métodos de pesca utilizados por la flota mexicana cumplen de manera responsable con los estándares internacionales más elevados para la protección de los delfines y, además, aseguran la sustentabilidad del atún y otras especies marinas del ecosistema.

De igual manera, la OMC determinó que la normatividad estadounidense no informa correctamente al consumidor sobre el verdadero daño que se causa a los delfines al amparo de la etiqueta “dolphin-safe”.

La OMC otorgó un plazo de 13 meses para que Estados Unidos pudiera cumplir con la decisión del Órgano de Apelación, el cual expira el próximo 13 de julio de 2013.

El pasado 5 de abril de 2013, Estados Unidos publicó una propuesta de modificaciones regulatorias sobre el etiquetado “dolphin-safe” a la que México presentó comentarios formales en oposición, debido a que dicha propuesta regulatoria no atendía a la decisión de la OMC, al mantener incentivos a prácticas pesqueras altamente depredatorias de especies marinas.

Adicionalmente, el gobierno de México informó oficialmente a la Oficina del Representante Comercial de ese país que la nueva regulación propuesta por Estados Unidos no cumple con la decisión de la OMC al mantener el efecto discriminatorio de la medida sobre las exportaciones de atún mexicano.

El 9 de julio de 2013, Estados Unidos emitió la nueva medida regulatoria con la que pretendía atender la decisión de la OMC. Sin embargo, no lo hace; mantiene dos regímenes normativos diferentes: (i) uno con medidas altamente efectivas acordadas internacionalmente para proteger a los delfines en la zona en la que México pesca (Océano Pacífico Oriental) y (ii) otro laxo y sin vigilancia establecido unilateralmente para otras zonas pesqueras en donde flotas como la estadounidense pescan y en las que continuará registrándose un alto índice de mortalidad de delfines.

El Gobierno de la República se encuentra en consultas con su industria para la cuantificación del impacto económico. En este sentido, México impugnará ante la OMC que Estados Unidos no cumplió con sus obligaciones ante esta instancia internacional. De confirmarse la violación, México estará en posibilidad de imponer represalias comerciales a Estados Unidos, para lo cual se está considerando suspender beneficios en diversos sectores productivos. Dicha suspensión se mantendrá hasta en tanto Estados Unidos no aplique adecuadamente la decisión de la OMC.

México continuará defendiendo al sector pesquero nacional y la sustentabilidad de las pesquerías ante la OMC y otros foros internacionales. México exhorta a los Estados Unidos a promover prácticas pesqueras sustentables que protejan a los delfines y a otras especies del ecosistema marino.